Bajo el nombre de diatermia se han recogido, durante
años, algunas de las terapias utilizadas en fisioterapia consistentes en el
calentamiento de los tejidos profundos con fines terapéuticos mediante el uso
de ondas de alta frecuencia, clasificadas como emisión no ionizante.
Debido a que las aplicaciones de la
termoterapia profunda son muy variadas, fáciles de aplicar, con escaso riesgo y con muy buena aceptación
por parte del paciente, es una de las técnicas de electroterapia más
extendidas, incluso para aquellos casos en los que el paciente tolera mal el
calor, ya que se pueden utilizar también de forma pulsada.
Los efectos de la
diatermia van a depender de la elección del tipo (baja <1000Hz, media
2000-10000Hz, alta >10000Hz frecuencia) y del momento de la aplicación
(lesión aguda, subaguda o crónica) para así lograr, entre otros beneficios,
analgesia, estimulación de la regeneración
o una disminución de la isquemia tisular.
Los últimos avances en fisioterapia nos permiten disponer
de potentes equipos de diatermia profunda como el equipo TCare cuyo tratamiento
se conoce como tecarterapia o la UHF, ultahigh frequency.
Hoy en día, bajo el concepto de
diatermia se engloban desde los sistemas más antiguos hasta los sistemas con
tecnología más moderna, aunque hay autores que hacen distinción entre ellos.
Si separamos aquellos sistemas más
antiguos de los más modernos podemos dividir estos en cuatro grandes grupos.
Los dos primeros serán tratados en esta
entrada y los otros dos los iremos redactando en otras.
MICROONDA Y ONDA CORTA
Los microondas son sistemas de diatermia
cuya penetración es menor, calentando
más el tejido graso que el músculo. Son ideales para aplicar en tejidos que se
encuentran muy próximos a la piel, sin embargo obtienen un rendimiento
terapéutico escaso a mayores profundidades y en especial cuando hay que
atravesar grandes densidades de tejido graso.
Con la onda corta la zona a tratar se
sitúa entre dos electrodos que forman el par condensador, entre ambos se genera
un campo, la polaridad varía 27.120.000 millones de veces por segundo generando
en el dieléctrico (en este caso el paciente) una fuerza electromotriz que será
la responsable del calentamiento debido al desplazamiento de los iones libres.
El campo de acción de ésta dependerá del tipo de electrodo usado. Los más
comunes en fisioterapia son los electrodos de inducción (como el circuplode del
Curaplus del grupo Prim), donde la profundidad de la aplicación será mayor que
en la microonda.
Beatriz Megías Adán
Centro de Fisioterapia Océano (Madrid)
muy bueno los usos de equipos fisioterapia para curar dolencias
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